Acaben a las Farc, pero ya




No entiendo algunas cosas. O LOS PERIODISTAS Y ALGUNOS POLÍTICOS SON MUY IDIOTAS, O YO LO SOY, O ELLOS NOS TRATAN COMO IDIOTAS.

Cómo pueden insinuar que si el presidente negocia con las Farc es porque está de acuerdo con ellos. ¿Para qué negociar con alguien que esté de acuerdo con uno? Si fuera así, ¿qué se iba a negociar?

Pretenden que la guerrilla deje de ser un grupo violento porque está en diálogos.

En primer lugar, ése fue el escenario en que se plantearon los diálogos desde el principio: dialogar en la guerra; que, como dice el presidente, el alto al fuego sea el resultado, no la primera fase. O sea no cometer los errores anteriores: se empezaba con altos al fuego para desembocar en la decepción de volver a la guerra. La idea mejor es que cuando se acabe la guerra, si ello llega a suceder (como resultado del proceso y no como condición hipócrita preliminar), se acabe de verdad, del todo.

Segundo, si las Farc fueran unas almas de Dios, ¿quién estaría interesado en que se desmovilizaran? El interés existe precisamente porque tienen gran capacidad de hacer daño.

Mírese como se quiera, las Farc y el gobierno son dos grupos que están en guerra, entonces tienen que hacer actos de guerra, y ¿cuál guerra no se ha llevado por delante a los inocentes?, ¿cuál? Precisamente eso la hace más merecedora de que se busque la manera de que se acabe. Si no fuera así, uno dijera: que sigan con su problema, es de ellos.

Es triste escuchar que "el Ministro de la Defensa es un acérrimo opositor al proceso de paz", como dijo un noticiario. Qué exabrupto: él debe ser el más interesado en que se acabe la guerra, ése debería ser su trabajo, ésa debería ser su mayor victoria.

Hay gente celosa de cuidar que a las Farc no se les perdonen pecados. Esa gente no ven hacia adelante sino el pasado. Con su actitud sostienen que se debe castigar el pasado, o sea que si ellos (los guerrilleros) no aceptan esos castigos, que no haya paz y que siga la guerra, acumulando más muertos.

Es mejor que se les perdone todo si eso garantiza que no continúe esta hecatombe, pero muchos piensan que no se les debe perdonar nada aunque eso conlleve a que sigan matando.

Imagínese los muertos que se hubiera ahorrado este país si hace 10 años se hubiera llegado a un acuerdo con ellos. Imagínese los muertos que se agregarán si ahora no se llega a un acuerdo con ellos.

El mayor homenaje que se les puede brindar a todos los que han sido mártires de esta guerra, es hacer que sus muertes y tormentos hayan llevado a este país a sacrificar lo que sea con tal de que no se sigan acumulando esas atrocidades.

Si se ha demostrado que no se puede acabar por las armas con ese grupo, que se haga lo que sea necesario, pero que esto se acabe de una vez por todas, que no sigan los guerrilleros montando presidentes que prometen acabarlas aprovechándose de la ignorancia del pueblo.

Si el gobierno no es capaz de acabarlas por las armas, ya, pero ya (este país no aguanta más), entonces que las acaben a pupitrazos, pero ya.

Que no sigan los guerrilleros desangrando el país con sus actos, ni los políticos y militares con la excusa de combatirlos. Y punto aparte, no final.

Sobre la confesión de Lance Armstrong






No creo que Lance Armstrong esté arrepentido en realidad según la entrevista que vi. Se nota que no está convencido de que cometió algo ilegal. No lo estoy condenando. Analicemos: en alguna parte dijo que se dopaba para estar al nivel de los demás. De ello se deduce, como concluyó lúcidamente un joven ciclista colombiano, que: o todos se dopaban, o era tan malo que la única forma de estar al nivel de los otros era dopándose. Que era demasiado malo hay suficientes pruebas de que no es la opción correcta, pues quedó de tercero en el Tour a una edad avanzada sin doparse, y desafío a que le den a alguien malo lo que ingería él a ver si se gana lo que él ganó. Por tantas noticias habidas y por haber, es muy posible deducir que la correcta es la segunda opción: que es corriente que las grandes estrellas de este deporte (y de otros) se dopen, de manera que el que quiera tener las mismas posibilidades de las otras estrellas para ganar, tiene que hacerlo. ¿Qué tal que Contador, Induraín, Lemond, Fignon, Hinault, y todos los grandes de este deporte se confesaran? Me pregunto también, ¿por qué no han aparecido los Ullrich, Klode, Basso, Beloki reclamando los títulos que les deberían pertenecer? ¿Tendrán la moral y el alma limpia para hacerlo? Todas estas son ideas que me hacen pensar que tengo razón al concluir (del análisis de la entrevista presentada en Discovery) que Armstrong no está realmente arrepentido. Avergonzado, sí; dolido, sí. Como todo ser humano que es acosado de una manera tan feroz. Pero, ¿cómo puede arrepentirse realmente alguien de haber hecho lo que hacen los que lo rodean, algo que es corriente en su círculo? Es muy difícil incluso que de verdad pueda concebir aquello como malo por mucho que se lo digan las personas que no pertenecen a su mundo. Vaya y dígale a un general que es malo matar a un muchacho a quien no conoce ni se ha interesado por entender las condiciones de vida que lo llegaron a ser un delincuente. ¿Quién podría convencerlo de que él mismo se convierte en un delincuente y que por lo tanto merece igual castigo? Esta es una sociedad que disfruta adorando ídolos para luego pulverizarlos. Lance dice que está en terapia. Afortunado él si existe una adecuada para su caso. ¿Existe alguna idónea para esta sociedad erigida sobre la hipocresía?

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